Mediterráneo Digital es el primer periódico que habla de mi película. Me encanta el titular que le han puesto al artículo: “Harto del cine para progres, un español produce la primera película sobre Blas de Lezo”
Podéis leerlo aquí:
https://www.mediterraneodigital.com/historia/historia-1/blas-de-lezo-pelicula
30 de enero de 2020
Bandera española y bandera británica
En el primer trailer se ven la Cruz de Borgoña representando a España y la Union Jack representando al Reino Unido. Ninguna de las dos estaba en uso cuando ocurrió el sitio de Cartagena de Indias en 1741.
Cuando Felipe V ocupó el trono cambió la Cruz de Borgoña por el escudo que se muestra en la imagen. He decidido poner la bandera de los Austrias porque es más fácil de dibujar y bastante conocida en la España actual. En la película el escudo de Felipe V no se vería bien porque tiene muchos detalles pequeños difíciles de dibujar.
Con la badera británica me equivoqué. La Union Jack es la bandera oficial de Reino Unido desde 1801, ochenta años después del sitio de Cartagena. En la película aparecerá la bandera correcta sin la Cruz de San Patricio (que representa a Irlanda). Es la que se muestra en la imagen.
Espero que se me perdonen estas imprecisiones históricas. Es mi primera película y a veces me cuesta acertar en mis decisiones.
Cuando Felipe V ocupó el trono cambió la Cruz de Borgoña por el escudo que se muestra en la imagen. He decidido poner la bandera de los Austrias porque es más fácil de dibujar y bastante conocida en la España actual. En la película el escudo de Felipe V no se vería bien porque tiene muchos detalles pequeños difíciles de dibujar.
Con la badera británica me equivoqué. La Union Jack es la bandera oficial de Reino Unido desde 1801, ochenta años después del sitio de Cartagena. En la película aparecerá la bandera correcta sin la Cruz de San Patricio (que representa a Irlanda). Es la que se muestra en la imagen.
Espero que se me perdonen estas imprecisiones históricas. Es mi primera película y a veces me cuesta acertar en mis decisiones.
28 de enero de 2020
Lo que no te mata te hace más fuerte
Es un error pensar que Blas de Lezo forjó su voluntad inquebrantable y capacidad de sacrificio a lo largo de su vida. Lo cierto es que ya era así desde el primer día. En 1704, con tan sólo quince años de edad, era un joven oficial que nunca había entrado en combate. El destino quiso que su primera batalla fuera la de Vélez-Málaga y que perdiera allí su pierna izquierda por el impacto de una bala de cañón.
El miembro quedó tan maltrecho que no hubo más remedio que amputarlo por debajo de la rodilla. El pobre muchacho sufrió un dolor atroz. Fue esta primera herida la que lo volvió tan osado y perseverante. Seguramente si hubiera gozado de buena salud en sus años mozos no habría sido tan buen marino.
Se da demasiada importancia a la defensa de Cartagena de Indias. Toda su vida fue interesante y merece ser contada. En 37 años de servicio tuvo tiempo para luchar en la guerra de sucesión, mantener a raya a los otomanos, limpiar los mares de piratas y someter a los ingleses la mayor humillación de su historia. Todo ello sin sufrir ni una sola derrota. Entre campaña y campaña todavía tuvo tiempo y ganas de casarse y formar una familia.
En mi película enseño toda su vida desde que era niño hasta que murió porque considero que si sólo incluyera sus principales batallas la película estaría incompleta. Además es necesario explicar un poco el contexto histórico para que se entienda mejor lo que hizo y por qué lo hizo.
El miembro quedó tan maltrecho que no hubo más remedio que amputarlo por debajo de la rodilla. El pobre muchacho sufrió un dolor atroz. Fue esta primera herida la que lo volvió tan osado y perseverante. Seguramente si hubiera gozado de buena salud en sus años mozos no habría sido tan buen marino.
Se da demasiada importancia a la defensa de Cartagena de Indias. Toda su vida fue interesante y merece ser contada. En 37 años de servicio tuvo tiempo para luchar en la guerra de sucesión, mantener a raya a los otomanos, limpiar los mares de piratas y someter a los ingleses la mayor humillación de su historia. Todo ello sin sufrir ni una sola derrota. Entre campaña y campaña todavía tuvo tiempo y ganas de casarse y formar una familia.
En mi película enseño toda su vida desde que era niño hasta que murió porque considero que si sólo incluyera sus principales batallas la película estaría incompleta. Además es necesario explicar un poco el contexto histórico para que se entienda mejor lo que hizo y por qué lo hizo.
26 de enero de 2020
El problema del cine español
El cine español es un mundillo muy cerrado que nada tiene que ver con la realidad que todos conocemos. Dicen ellos, los cineastas, que una película sobre Blas de Lezo costaría la friolera de seis millones de euros, como mínimo, y que sería imposible financiarla sin subvenciones públicas. También dicen que en España el cine histórico no interesa, como demuestran los estrepitosos fracasos de películas como Oro, 1898 Los últimos de Filipinas, Sangre de mayo y El dorado.
Artículo de El Español: Por qué la película de Vox sobre Blas de Lezo sería un fracaso en la taquilla
El problema no es el cine histórico ni el desinterés del público, no, el problema son ellos. Siempre muestran en sus películas a unos españoles brutos, estúpicos y despreciables. Nos cuentan que ser español es una vergüenza. Algún día aprenderán que insultar al cliente es malo para el negocio.
En el fondo el público les da igual. Cada una de sus películas es una excusa para pedir al político de turno una jugosa subvención. ¿Para qué esforzarse si les regalan el dinero? Vox tenía toda la razón cuando criticó las subvenciones al cine. Puro chiringuitismo.
Cuando saltó la polémica de los Goya del año pasado varios medios de comunicación se apresuraron a llevarle la contraria a Vox con titulares como Por qué la película de Vox sobre Blas de Lezo sería un fracaso en la taquilla y La película sobre Blas de Lezo que pidió Vox lleva ya un año en producción. Cualquier excusa es buena para disimular la ineptitud de guionistas, directores y productores.
La supuesta película que lleva un año en producción no es más que una serie de cuatro capítulos para emitir en Televisión Española, que ni siquiera tiene asignado un presupuesto. Ha pasado un año y la serie sigue sin hacer. Además es inverosímil que Televisión Española emita la serie mientras esté administrada por PSOE y Podemos. No lo harían por nada del mundo.
Artículo de ESdiario: La película sobre Blas de Lezo que pidió Vox lleva ya un año en producción
La verdad es que si se quiere, se puede. A mí me ha bastado un año para hacer una película sobre Blas de Lezo sin inversión privada ni subvenciones públicas. No me ha hecho ninguna falta incluir propaganda ideológica, ni humillar al protagonista, ni insultar al público. Tampoco han sido necesarios actores famosos ni un director de renombre. Era tan sencillo como leer la biografía del personaje y buscar la manera de contarla con imágenes y sonidos. ¿Por qué no lo hacen los profesionales del cine? Ya nos lo dijo Borja Cobeaga: porque no les da la puta gana. Menuda respuesta. Luego se quejan de que la gente no va al cine.
Artículo de El Español: Por qué la película de Vox sobre Blas de Lezo sería un fracaso en la taquilla
El problema no es el cine histórico ni el desinterés del público, no, el problema son ellos. Siempre muestran en sus películas a unos españoles brutos, estúpicos y despreciables. Nos cuentan que ser español es una vergüenza. Algún día aprenderán que insultar al cliente es malo para el negocio.
En el fondo el público les da igual. Cada una de sus películas es una excusa para pedir al político de turno una jugosa subvención. ¿Para qué esforzarse si les regalan el dinero? Vox tenía toda la razón cuando criticó las subvenciones al cine. Puro chiringuitismo.
Cuando saltó la polémica de los Goya del año pasado varios medios de comunicación se apresuraron a llevarle la contraria a Vox con titulares como Por qué la película de Vox sobre Blas de Lezo sería un fracaso en la taquilla y La película sobre Blas de Lezo que pidió Vox lleva ya un año en producción. Cualquier excusa es buena para disimular la ineptitud de guionistas, directores y productores.
La supuesta película que lleva un año en producción no es más que una serie de cuatro capítulos para emitir en Televisión Española, que ni siquiera tiene asignado un presupuesto. Ha pasado un año y la serie sigue sin hacer. Además es inverosímil que Televisión Española emita la serie mientras esté administrada por PSOE y Podemos. No lo harían por nada del mundo.
Artículo de ESdiario: La película sobre Blas de Lezo que pidió Vox lleva ya un año en producción
La verdad es que si se quiere, se puede. A mí me ha bastado un año para hacer una película sobre Blas de Lezo sin inversión privada ni subvenciones públicas. No me ha hecho ninguna falta incluir propaganda ideológica, ni humillar al protagonista, ni insultar al público. Tampoco han sido necesarios actores famosos ni un director de renombre. Era tan sencillo como leer la biografía del personaje y buscar la manera de contarla con imágenes y sonidos. ¿Por qué no lo hacen los profesionales del cine? Ya nos lo dijo Borja Cobeaga: porque no les da la puta gana. Menuda respuesta. Luego se quejan de que la gente no va al cine.
23 de enero de 2020
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